[spa] La diabetes y la enfermedad de Alzheimer son enfermedades metabólicamente complejas con una alta prevalencia en la población. Debido a ciertas características en su patogenia y a que existe una alta frecuencia de diabetes en los pacientes de Alzheimer, se plantea la hipótesis de que algunos elementos implicados en el desarrollo de la diabetes puedan ser también responsables de la aparición de Alzheimer y dar lugar a lo que se ha denominado recientemente como “diabetes tipo 3”. De entre estos elementos, cabe destacar la formación y acumulación de beta amiloides junto a la hiperfosforilación de la proteína Tau a causa de procesos fisiopatológicos asociados a la diabetes: daño oxidativo, resistencia a la insulina, neuroinflamación y alteraciones en la función de los macrófagos cerebrales, entre otros elementos. Además, la formación de amiloides de amilina y la glucosilación de proteínas debida a la hiperglucemia crónica presente en la diabetes también estarían implicados en la neurodegeneración.
Todos estos elementos demuestran la interconexión entre la diabetes y la enfermedad de Alzheimer, de forma que aportan evidencias que permiten clasificar a esta neuropatía como un tipo de diabetes y si un tratamiento adecuado para la diabetes puede prevenir la aparición de esta demencia senil.