[spa] En el presente trabajo analizaremos los microdatos de la encuesta del gasto de
los hogares en educación. Más allá de la partida de gasto público estatal en
educación, las familias tienen que hacer frente a unos gastos para llevar a cabo
determinados estudios y formaciones. Es decir, el estado y en concreto el
Ministerio de educación, tiene partidas asignadas para el gasto que supone un
servicio público educativo. Con esas partidas se cubre una parte del gasto,
pero queda en manos de los hogares un gasto complementario. Por tanto,
estudiar en las primeras etapas obligatorias o formarse en etapas superiores,
supone un coste para las personas que lo realizan.
Más allá de los gastos de matrícula, hay una serie de gastos asociados a la
formación que se deben tener en cuenta, como, por ejemplo: Transporte,
comedor, bienes informáticos, extraescolares, clases de refuerzo o mobiliario,
entre otros. Se asume, por tanto, que este tipo de gastos forman parte de las
herramientas que necesita una persona para formarse. Y se contemplan en los
microdatos de la encuesta que nos ocupa.
Todos esos gastos en los hogares referidos al ámbito educativo/formativo,
surgen de la capacidad económica de las familias y esta capacidad económica
viene determinada por aspectos que explicaremos posteriormente en nuestro
análisis. Para compensar esa capacidad o más bien, la falta de ella, se
contempla en la encuesta la concesión de becas. Se dividen por niveles
educativos y a su vez por tipo de beca según se conceda para cubrir la
matrícula, los gastos de transporte, gasto en libros o cualquier otra necesidad.
Con toda esta información procederemos a analizar los datos del fichero de
microdatos que hemos seleccionado, primero con un análisis descriptivo y
después con un modelo de regresión lineal múltiple.