[spa] Garantizar la salud física y mental de niños, niñas y adolescentes es una prioridad para cualquier sociedad
democrática. Este estudio examina las consecuencias de la pandemia de COVID-19 en la salud mental de este
grupo de personas, cuya salud física fue menos afectada por la pandemia, pero que perdió contacto social
debido al cierre de las escuelas. Para ello, se presenta una encuesta que incorpora las mismas preguntas de la
Encuesta Nacional de Salud de España 2017 para comparar los cambios después de la pandemia. Las mayores
contribuciones de este esfuerzo son, por un lado, el análisis del posible efecto que ha tenido la pandemia sobre
los trastornos mentales y de conducta, con especial atención en los pensamientos suicidas. Por otro lado, se
analiza según edad, sexo y nivel socioeconómico para identificar los potenciales factores de riesgo. Dada la
importancia de contar con un sistema público que permita la detección y el acceso a la salud mental, analizamos
los principales retos de nuestro sistema, proponiendo recomendaciones y buenas prácticas para garantizar que
la salud mental sea accesible a toda la infancia y adolescencia.