[spa] Durante la pandemia del Covid-19, los servicios sociales municipales se vieron desbordados por la elevada
presión asistencial. En el caso del ayuntamiento de Palma, la totalidad de los recursos humanos de los centros
municipales de servicios sociales (CMSS), se destinaron a la gestión de prestaciones de carácter individual.
Las entidades del Tercer Sector de Acción Social (TSAS), por su parte, adaptaron sus actuaciones a través del
uso de las nuevas tecnologías con el objetivo de mantener el vínculo con las personas del territorio, al mismo
tiempo que iniciativas ciudadanas surgidas de forma espontánea reivindicaron con sus acciones la importancia
de la comunidad y de las redes de apoyo. El presente trabajo forma parte de una investigación más amplia
desarrollada desde una perspectiva metodológica cualitativa a partir del estudio documental y el análisis de
entrevistas realizadas durante el año 2020 y 2021 en el contexto de pandemia. En esta comunicación
pretendemos invitar a reflexionar sobre la debilidad en la que se encuentra el trabajo comunitario en el marco
de los servicios sociales, la pérdida progresiva de “lo relacional” en la intervención profesional y el uso de las
nuevas tecnologías en la acción social.