[esp] A partir del Concilio de Trento (1563) se multiplicaron en Europa las fundaciones de conventos de diferentes Órdenes; muchas religiosas emprendieron largos viajes para fundar, bien en otras ciudades francesas, bien en Nueva Francia. Este artículo pretende analizar algunos de estos relatos de viaje bajo el Antiguo Régimen, poniendo el acento en el tratamiento de los pasajes descriptivos. Ello resulta especialmente interesante pues, durante sus desplazamientos, las religiosas debían guardar la clausura: escasean así las descripciones del espacio exterior, mientras que las de espacios interiores, especialmente los interiores consagrados, adquieren especial relevancia. Se aborda asimismo la caracterización de la figura del « Otro », ya sea 'salvaje' o 'hereje'.