[spa] El siglo XXI y sus nuevos usos lectores conllevan una paradoja: se lee más
contenido pero cada vez menos literatura. La incesante producción de
información y contenido en múltiples dispositivos y pantallas conlleva un
descenso de la comprensión lectora y de la concentración y pausa requerida
para disfrutar de la literatura. Este hecho tiene un efecto directo en el hábito
lector de nuestros jóvenes que decae cada día más, por lo que es necesario
tomar medidas. Este estudio se centra en la implantación de un club de lectura
en una escuela desde la biblioteca del centro, como medida para promover la
lectura entre los más jóvenes. La propuesta práctica se basa en incluir esta
práctica en una situación de aprendizaje en la que se analiza el libro de Nada
de Carmen Laforet. La SA se resume en tres actividades que se ajustan a tres
niveles de lectura diferentes; a medida que se avanza en las actividades el
objetivo es alcanzar un mayor nivel de lectura. No es una medida extraña pues
al menos tres competencias básicas están destinadas a la competencia lectora,
es por ello que consideramos esta propuesta una solución práctica. Además,
en los anexos, ofrecen materiales educativos relacionados con la SA