[spa] Con esta contribución se quiere poner en común una experiencia acerca de cómo adaptar
la metodología docente de aula invertida de una asignatura de matemáticas para ingeniería
(Ecuaciones diferenciales) a un contexto de pandemia, presencialidad limitada y
distancia social, lo que complica el trabajo del alumnado en el aula. La solución puesta en
práctica consistió en trasladar más actividades de la parte presencial a la no presencial del
proceso de aprendizaje, en particular las que conllevaban más interacción y proximidad
entre el alumnado entre sí y con el profesorado de la asignatura. Las tasas de éxito y de
rendimiento de la experiencia son positivas, ya que se invierte una tendencia a la baja y se
recuperan resultados anteriores a la pandemia, sin rebajar el nivel de exigencia. También
mejora la valoración de la asignatura y sus materiales docentes por parte del alumnado
respecto a cursos previos a la pandemia, tanto en encuestas oficiales como en las realizadas
por el profesorado de la asignatura. Por el lado negativo, aumenta la tasa de absentismo
y se corre el riesgo de facilitar la pasividad del alumnado.